viernes, 14 de marzo de 2008

Gracias, vida










Como el cielo al amanecer, la brisa cálida como tu piel, ya no hay oscuridad en mi corazón porque tú me hiciste ver lo que es vivir un ideal. Me mostraste un camino que yo supe seguir. Me guiaste a través de momentos de temor, me ofreciste tu mano, pétalos de la vida, oh gran vida. Déjame respirar tu aire, déjame ver lo que ven tus ojos. Sentir tu calor, vivir tu sueño y hacerlo mío, siendo parte tuya. Vida mía, te pertenezco. Cada suspiro es tuyo. Cada mirada, cada parpadeo de mis ojos hace referencia a tu preciada existencia. Estoy llena de este sentimiento sin explicación, perdida en un universo infinito de sensaciones indefinidas. Llévame a tu mundo, abrázame y hazme sentir amor. Gran corazón mío, pájaro de mi cuerpo, vuela alto a tu tan buscada libertad.

Palabras sin sentido, que de una manera natural se adaptan a la hoja que mantengo en mi mano. Mi mano, el instrumento de mi alma.

No pienso, solo siento. Oh, tú, alegría, que te posaste dentro de mí, me hiciste despertar. Hoy te vi frente a mí, como aquella luz, llamada sol.

Esperanza divina que me hiciste sonreírle a la vida. Lograste vencer las paredes de mi ser, liberándome. Sueño preciado, sueño vivido, sueño dormido que me hiciste crecer. Semilla a flor, flor a tierra. Tierra a semilla. Llevada por el viento, sin camino, solo sueño un sueño de amor. Dentro de ti, yo estaré cuando tú me busques. No hay fuerza más grande que el amor. No hay palabra más sincera que la que surge a través del amor. Tú eres el amor que busqué y encontré. Mi felicidad. Mi paz. Mi ser.

Gracias, vida.

1 comentario:

Matías Miguel Roude dijo...

Cuando leo cosas como esta, me es dificil pensar que a veces hables tan mal y desconoscas el castellano... (wuf wuf)

Realmente, estas llena de poesía, Mish y de amor. Imperfecto, como en todos los seres, pero perfecto para vos.