sábado, 29 de noviembre de 2008

Incoherencias

No sé por qué escribo. Pero ya no necesito un por qué. Vuelvo a casa y siento la necesidad de expresar aquellos instantes que disfruto como un recuerdo para no olvidar los pequeños regalos de la vida que recibimos cada día. Para no olvidarme de la lluvia, ni de lo que es estar viva. Demasiado tiempo me sentí muerta pero hoy cada día me transmite ese algo que me hace sonreír. Sí, a veces lloro, por una cierta frustración que siento en mi alma, algo tan profundo que no tiene palabras para describirse, pero confío en que también eso es parte del crecimiento, y que algún día lograré comprender aquellas lágrimas. Me siento llena, y a su vez vacía. Estoy pero no sé ya si realmente estoy. Qué parte de mi está, y cuál no…”yo ya no soy yo, yo ya no soy nada”?
Y sin embargo algo de mí se despierta cada día, mi ilusión de mi misma, aquello que es irreal.
No quiero tener que regresar más, quiero volver a casa, y sin embargo el día a día, estas pequeñas felicidades, me enseñan de alguna forma a vivir esta vida a pleno. Estoy para aprender y estaré el tiempo necesario.

Sólo a la lluvia















Lluvia, bella lluvia que te sentí hoy
mientras caías con tus lágrimas de cristal
te llamaba por tu nombre, por tu alma
mientras el viento se acurrucaba en mis palmas
que abría para recibirte, lluvia, pureza.

Como si acaso fuese la primera vez
que dancé bajo tus cálidos abrazos
cerrando los ojos y dejándome llevar
por tu transparente oro natural,
acaso como si fuese la primera vez.

Feliz, feliz me vi, reencontrándote,
redescubriéndote hoy después de tanto tiempo
he vuelto a nacer por un instante
mientras me hablabas a través de mi cuerpo
me volviste a bautizar con tu poder.

Del cielo vienes y al cielo regresas,
por instantes nomás tu presencia anuncias
tal vez minutos, tal vez días, pero siempre
regresas a tu hogar allí en lo alto,
desde donde traes noticias de los ángeles.

Escribo sobre ti pero no tengo deseos
de encontrarle sentido a este supuesto poema
que en realidad ningún poema es
más que palabras sueltas que de alguna forma
caen, como tus lágrimas, sobre papel.

No hay orden, ni intento mantener una rima
tan sólo pienso en ti y en los momentos que hoy te vi
y recuerdo la libertad que sentí al saber
que no le pertenecías a nadie, y libre eres
de ir y volver como deseas.

No te estancas, no te detienes, siempre fluyendo
en tus miles de formas y moldes te adaptas
y nunca te quejas, ni grites, ni hablas
porque tu esencia es el silencio que generas
en donde decides caer.

Ay, cómo me alegras con tus cantos silenciosos
que de vez en cuando decides pronunciar
y me recuerdas al sonido de mi Madre,
que canta igual que tú,
pero más bello aún.

Alimenta la tierra, alimenta al hombre,
con tu gran poder danos tu fuerza, tu energía curadora
porque eres lo que en nosotros se encuentra
y de lo que vivimos cada día.
Gracias por tu cariño, lluvia madre lluvia.

domingo, 23 de noviembre de 2008

Words of hope














So what if I just let this time go by
and wait to the new sun to arise
from behind the dark clouds
and the blood-stained skies?

And what if I hold my hands
high up to the brightest light
and let my imagination fly
to the miracles passing by?

And what if, between all
this darkness, I can be
a tiny little light that guides
back to the love that we decide
to hold dearest to our hearts?

And so, when sun hides
behind walls of despair and pain
I turn my back towards them
and praise for hope to lift
souls up to their very first way.

And one day, maybe one day,
not too far away, we may all find
each other again on the path
of no restrain.

So listen closely, Angels of my dearest God,
I may not yet see the way the Highest sees,
but still I raise my hands as far as I can
to the faith that I know has still no stains.

lunes, 17 de noviembre de 2008

Mensajero de luz















Hoy me mandaste un ángel del cielo

sin que te lo pidiera me estrechaste tu mano,

o será que desde el fondo me oías gritar

tu nombre a los cuatro vientos?


Tan solo tú tienes el poder de saber

lo que mis sordos oídos necesitan oír,

tan sólo tú sabes comprender

la incomprensión de mi ser.


Hoy volví a caer a tus pies

maravillada por tu gentileza

de no olvidarte de mi, tranquilizarme,

y transmitirme que aún soy tú.


Hoy me diste un regalo precioso

tal vez tan simple que no valga la pena

siquiera nombrarlo, y sin embargo

tan grande, que no puedo callarlo.


Como tantas veces, mis lágrimas

ocuparon el lugar de las palabras

pero sabiendo que cada gota

me acercará más y más a ti.


Piensen lo que piensen

los dioses de este mundo,

nunca te he abandonado ni lo haré,

y cada día más cerca te siento, sé que te veré.


Hoy me enviaste tus vibraciones de amor

que me han hecho caer y volar a la vez

y comprendí tal vez más que nunca

que puedo estar bien.


Aunque hoy llore, son lágrimas de limpieza

que tarde o temprano ya no tendrán razón de ser.

Poco a poco irán limpiando

las oscuridades de mi proceder.


Puedes ver mi corazón, porque tuyo es

y me has demostrado una ves más

la belleza que es “ver”.

Cantos a la luna














Cantaré una canción de alabanza a la luna
que traiga nostálgicos recuerdos
de aquellas noches de alegría compartida
cuando en el silencio de la oscuridad
entre sonrisas me susurrabas al oído.

Bellas tus palabras, aunque en ellas
no encontraba solución alguna
a mis dolencias profundas.
Tan sólo me enseñaste a disfrutar
de la vida que me ha sido dada,
con tu alegría de vivir
me devolviste la sonrisa perdida.

Meses han pasado desde aquel incidente
en el que por casualidad
mi corazón con tus palabras tocaste.
Pero oh, qué son las palabras
sino simples sonidos que se pierden
entre la vasta amplitud del cielo?

Qué son más que intentos de expresar
lo inexpresable en momentos
en que la palabra nada vale?
Dónde esta la luz que tan cerca
y tan lejos está?

Y sin embargo este es mi camino
que decidí recorrer y no dejaré
porque caminos hay varios
pero destino tan sólo uno
que nos llevará a todos de regreso
a nuestro hogar perdido.

Si tú pudieras cantar oh bella luna,
qué me cantarías en mis sueños?
De cuántas vidas me hablarías,
para que pueda entender
lo que hoy no comprendo.

Pero pienso que si hablaras
de todos modos callarías
porque tan solo en el silencio
encontrarás mi sonido.

Y hoy tan solo te miro, bella luna
que brillas allí en lo alto del firmamento.
Habrá algunos que te ven
y recordarán la nostalgia,
pero yo tan solo te veo así,
por la luna que eres.

Enséñame a ser tolerante
y mostrarme el camino
que debí recorrer hace tiempo,
aquel que creí comenzar varias lunas atrás.

Cuán equivocada estaba, ciega ante la luz,
arrastrando conmigo aquellas manos
que tú has puesto para que me levanten.
Hoy volveré a levantarme
y las veces que sea necesario,
y el “intentaré” se convierte en “haré”.

Tú, luz




















En tu luz es donde mi alma descansa
en tus inmensos ojos me recojo
es tu sonrisa la que me hace sonreír
y tus palabras que me llevan a vivir.

Visualizo los encuentros que aún tendremos
y recuerdo los momentos que juntos pasamos.
Cuando ya no hay nada en lo que apoyarse
tan sólo en tu calor encuentro respuestas.

Cántame una canción y enséñame a vivir
porque tan sólo si tú me guías
encontraré una forma de seguir
cada día acercándome un poco más.

Y si decides dejarme aquí
no te preocupes que de todas formas
lograré seguir, y ya de nada dependerá
mi camino a elegir, más que de mí.

El camino es solitario y sin embargo no lo es.
Caminamos solos pero siempre acompañados
bañados en el amor de tu luz,
soñando en la belleza de tu eterno resplandor.

Vivo, porque vives en mí.
Luz, bella luz que por allí te encuentras
que te he buscado por tanto tiempo,
creo haber nacido tan sólo para encontrarte.

Falta poco tiempo para el renacer del espíritu
pero el tiempo ya no es tiempo,
el día ya no es día y la noche ya no es noche,
el tiempo se detuvo, pero el tiempo volverá.